2/28/2018




(De la serie Tú adentro en la costilla. Verano de 2013)

Éramos como los hombres de siempre
Meteoros
Forasteros
Trenes de arena quemándose a la orilla
Simios de nadie urgiendo nuestros falos
Teníamos días libres
Y bebíamos
Nos levantábamos del comedor dejando a medias el almuerzo para abrazarnos otra vez
Mirar por la ventana la ciudad
Llorábamos a solas el uno por el otro en medio del tumulto
Petrificados en la escalera eléctrica que nos llevaba a nuestra muerte
En la caminadora del gimnasio
En el taxi
La vida de la calle resultaba inocua
Llorábamos en todas partes como soldados viejos que escupen su armisticio
Como presentadores de tv bajo el asedio de la sorna
Pero al anochecer
Mientras preparábamos el café y la cena
Nos abrazábamos de nuevo          como los hombres de siempre

Luis Javier Alvarado